dilemas morales (ii)
¿Se acuerdan de aquellos dilemas morales de los que hablábamos hace unos meses? En esa entrada les decía que me surgían muchas preguntas cuando me enfrentaba a la música de alguien cuyas ideas no me gustaban, o bien cuando había opiniones que me desagradaban profundamente en la letra de las canciones. No es que hoy haya encontrado la solución al problema, pero sí tengo una anécdota que viene al caso.
Hace unos años yo era bastante más rígida que ahora en mi forma de pensar y de actuar. No es que ahora sea un corderito, pero soy capaz de admitir que existen tonalidades entre el blanco y el negro. El caso es que, cuando empezaba a escuchar cosas que se salían de la esfera del rock y el pop, un amigo (hola, Jose) me pasó un disco de los Digable Planets. Era el primero, Reachin' (A new refutation of time and space) y me gustó tanto que lo escuché sin parar durante bastante tiempo. En plena fiebre con el grupo me compré el segundo disco, Blowout Comb, pero nunca llegó a interesarme demasiado, prefería escuchar el anterior aunque sólo lo tuviera en cinta.
Sin embargo, un día me paré a mirar los títulos de las canciones y me encontré con una que me pareció sospechosa. Se llamaba La femme fetal. Intenté escuchar y entender la letra y llegué a la conclusión de que hablaba en contra del derecho de las mujeres a abortar, así que pensé "vaya, qué lástima" y fui dejando poco a poco de lado el disco porque ya no me sentía cómoda escuchándolo.
Hace más o menos un mes me puse a recuperar algunos discos y ése estaba entre ellos. Lo metí en el iPod y lo he estado escuchando bastante estos días, en un extraño ejercicio de nostalgia. Me resulta curioso volver a poner discos que hace más de diez años que no escucho y encontrar parte de mí en ellos, de como era entonces. Después de darle muchas vueltas a lo que había escrito hace unas semanas y al hecho de ser capaz de obviar algunas de mis convicciones para escuchar algunas canciones, decidí que en este caso también podía hacerlo. Y en el fondo me alegró, me pareció bien poder oírlo y disfrutar de las canciones, aunque la verdad es que La femme fetal no la pongo mucho porque es de las que menos me gustan.
Hasta que hace un par de días pensé que debería volver a prestar atención a la letra para comprobar lo que decía. La busqué en Internet, ese invento estupendo que tenemos ahora, y me encontré con que iba en el sentido contrario de lo que yo había entendido hace no sé cuantos años. Me hizo bastante gracia (aunque reconozco que no me sorprendió) descubrir que le había dedicado tan poco tiempo que no había sido capaz de darme cuenta de su verdadera letra. Y lo más curioso es que tampoco me alivió demasiado. Simplemente pensé "ah, qué bien", pero mi impresión sobre el disco siguió siendo la misma. Supongo que en el fondo nunca había cambiado, sólo me había obligado a mí misma a no escucharlo.
Me gustó haber vuelto a hacerlo incluso creyendo que no estaba de acuerdo con la letra de una de sus canciones, pero eso no responde a todas las preguntas que sigo teniendo y que ya comentamos en la entrada anterior. Poco a poco, supongo.
Actualización: revisando mis discos, estoy segura de que no fui yo quien compró el segundo disco de este grupo, sino Jose, pero me lo grabó en CD. Estoy senil ya, o será exceso de discos... y de años.
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