accidentes fortuitos

Ayer por la tarde fuimos a caminar a la Avenida Marítima y, al cruzar la calle ya de vuelta, Jenaro metió el pie en un bache del asfalto y se hizo un esguince bastante doloroso. El pobre está en casa con el tensoplast, una revista, cinco o seis libros y los mandos a distancia de tele, vídeo, equipo de música y DVD.

Tiene para 15 días de baja por lo menos. Menos mal que siempre le quedará el mundial de baloncesto para no morir de aburrimiento.