someone gave me a present today
Una de las cosas que más me gustan de algunos blogs, sobre todo de los blogs de MP3, es el buen rollo que consiguen crear entre gente que no se conoce de nada y que vive a miles de kilómetros de distancia. El mérito lo tienen, principalmente, los autores de los blogs y su voluntad de subir las canciones o los discos que la gente les pide. También influye mucho, claro, que los lectores sean gente educada y que sean capaces de decir "por favor" y "gracias".
Hay blogs en los que se pide explícitamente la colaboración del público. Gente que es capaz de decirte: "dime qué quieres escuchar y yo te lo conseguiré y te lo pondré aquí". Para mí, es un gesto maravilloso y desinteresado. No me creo que nadie se tome tantas molestias por tener un par (o mil, me da igual) de lectores más al día. Sobre todo porque la mayoría de las personas que hacen esto no lo hacen sólo una vez, sino que es su modus operandi habitual, al margen de la música que postean porque les apetece. Entre estas almas generosas que pueblan la red, una mención especial es para Baby Borderline o Sylvie Piccolotto, una chica brasileña que vive en Argentina y que, además de poner cada dos o tres días un buen puñado de discos en su blog, es absolutamente encantadora agradeciendo los comentarios y los correos que le envía la gente, cuando todo el mundo debería estarle agradecido a ella.
Creo que cuando una persona te dice que pondrá la canción o el disco que le pidas en su blog es como si te estuviera regalando una caja vacía y te dijera: "pon aquí tus sueños" y luego tú la abrieras y encontraras tu sueño dentro. A mí hoy me ha pasado algo parecido.
Hay una canción que me lleva persiguiendo años. La tenía mal grabada de la radio en una cinta ya a punto de la autodestrucción y no había podido encontrar el disco en ninguna tienda. Se trata de la canción que incluyó Redd Kross (Yesterday once more) en el disco de homenaje a los Carpenters de hace algunos años, I wish I were a Carpenter. El otro día, yendo de blog en blog, encontré un post de Lyn, la autora de Chick Rawker, en el que incluía la versión de American Music Club para ese disco (el enlace ya no funciona). Le pedí, con todo mi atrevimiento y sin haber pasado nunca antes por su blog, que me pusiera la de Redd Kross, y hoy la ha subido en este post para el que podías pedirle lo que quisieras. Y yo he podido bajarla y escucharla entera de nuevo, y ha sido genial.
Es una de las mejores canciones que he escuchado nunca. Ya, ya sé que no es la versión original, pero ésta es la que me gusta. Vayan al blog, disfruten del diseño tan chulo que tiene, bajen la canción, escúchenla y luego, si son capaces de decirme que no está bien, ya me las veré con ustedes en los comentarios.
Thank you, Lyn!
3 comentarios:
Es que los Carpenters, aunque cursis, eran grandes.
Es una pena que todos esos deseos de ayudar y agradar a la hora de la verdad los machaque la masa.
Y al final cada uno en su casa a lo suyo.
Jo, Hristo, sí que te veo pesimista hoy. Yo creo que las masas en general suelen estropearlo todo, pero eso no quita para que haya pequeños detalles por parte de unas personas y otras que hagan la vida más agradable.
Como el blog de Madrid Photobloggers, que no había descubierto hasta hoy (por tu post de Un punto de vista) y me parece una idea cojonuda y además veo que la gente se está apuntando. Me refiero a cosas así.
Besos y anímate (si es que no lo estás, que también yo saco unas conclusiones por dos frases de nada que pa qué).
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