15.9.06

estupor y temblores

No suelo fijarme mucho en la publicidad con la que intentan bombardearme cada vez que abro una página de internet. Lo cual no me parece nada bueno, todo sea dicho, porque significa que estoy tan acostumbrada a este tipo de ataques que ya me pasan desapercibidos. Conscientemente, claro. En mi subconsciente no sé el efecto que pueden tener, y es por eso que no estoy contenta con mi indiferencia. Me gusta poder quejarme y patalear cuando algo me desagrada, igual que estuve haciendo durante meses en Madrid a cuenta de las pantalla de televisión agresivas, maleducadas y partidistas que instalaron en todos los andenes de metro, acabando con la tranquilidad de los viajeros y con sus minutos de lectura tranquila entre tren y tren.

El caso es que últimamente algo me llamaba poderosamente la atención cuando abría mi correo de Gmail en modo web. Como lo tengo redirigido al Outlook, no lo hago a menudo, pero a veces lo miro en casa de mis padres, por ejemplo. Y, desde hace unos meses, cada vez que entraba en la página de Gmail me encontraba con una noticia encima de mis correos que solía tener un efecto instantáneo en mí, generalmente de estupor. Entonces miraba con más atención lo que acababa de leer y siempre resultaba que la noticia ponía al lado: Libertad Digital. Y yo pensaba “ah, vale, que son los fachas estos”. Y ya me quedaba tranquila.

Pero ayer ya no. Ayer no porque no podía creerme que tuviera tan mala suerte que siempre me tocara una noticia de Libertad Digital, con la de periódicos digitales que hay en este país. Así que me puse a investigar y descubrí varias cosas interesantes.

La primera es que la nueva barra de noticias que han puesto en Gmail se puede quitar, cosa que hice de inmediato. La segunda es que las páginas que han elegido para ponerte las noticias cuando tu idioma es el español son éstas:

¿No les parece tremendo? A mí, sí. Ni uno solo de estos feeds tiene absolutamente nada que ver conmigo, lo cual me escamó aún más, porque creía que este tipo de cosas en internet se hacían previo estudio oculto de tus intereses para que tuvieras publicidad teledirigida. Así que abrí otra cuenta que tengo en Gmail y que no uso nunca y comprobé que tenía exactamente lo mismo, o sea, que de estudio previo, nada, monada.

La tercera cosa que descubrí fue que si elegía como idioma el inglés (que es como lo tenía hasta hace poco y por eso antes no me había dado cuenta de la barra de noticias nueva), me aparecían el doble de feeds de noticias en la barra nueva. Esto entra dentro de lo normal por ser Gmail un producto de Google, que a fin de cuentas es una empresa del mundo anglosajón y etc. Pero además, los feeds me parecían mucho más serios que los del castellano, aunque no sé si eso ya es una apreciación subjetiva.

Desde luego, en ambos idiomas todos los feeds son configurables: se pueden eliminar y agregar otros, además de ordenarlos en una pantalla muy mona de mantenimiento. Pero yo prefiero eliminarlos, no me interesan. Me considero una persona medianamente informada de lo que ocurre a mi alrededor, por elección propia. Leo las noticias cuando quiero, donde quiero y como quiero. No necesito que me traigan los titulares hasta mi correo electrónico, porque son ámbitos que yo he elegido separar. Tampoco necesitaba una voz estentórea en el metro contándome las cinco noticias que ellos consideraban que el pueblo podía conocer al modo en el que pensaban que podíamos concerlas. NO.

De todas formas, lo que me impulsó inicialmente a soltar este rollo aquí fue mi sorpresa al ver que el único feed de noticias nacionales en Gmail (de hecho, el único de un periódico que no es de la sección de deportes) es de Libertad Digital, amén de ser el que más a menudo parece actualizarse, o será que la casualidad en mi caso me juega malas pasadas. ¿Cómo lo han conseguido? ¿Es que están en todas partes? ¿Tanto afán tienen por expandirse, por conquistar nuestro espacio, por amargarnos cada segundo del día con su bilis corrosiva?

Conmigo no lo van a conseguir. Valoro mi tranquilidad, tengo en suficiente estima mi sentido común y mi cultura como para no darle ni una miajita de crédito a sus noticias. Ni espacio encima de mis correos, desde luego. Señores, asaltos en mi propia casa, no, gracias.

PD: El título de la entrada es el de un libro de Amélie Nothomb que aún no he leído. Sí leí "Les combustibles" y dejé a medio "Les catilinaires" porque pudo con mis nervios.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues no sé, a mí me daría más miedo que supiesen cuales son mis gustos e intereses, y que los feeds coincidiesen con ellos.

En cuanto a que los contenidos que ofrezcan sean sólo esos, realmente me importa poco. Al igual que tú, mi consiciente ha desarrollado la capacidad de ignorar todo aquello no conforme con mis gustos, como si fuese spam. Tienes razón en que quizás sea bastante peligroso, por el tema de que vaya a parar a otras zonas de mi cabeza sobre las que no tengo control. Además, el hecho de estar "insensibilizado" contra lo que me molesta probablemente no sea algo muy bueno, pero, en palabras del gran sabio Murtaugh: I'm too old for this shit.

Ana Saturno dijo...

:-D

No sé quién es Murtaugh, pero si todas sus frases son como esa, desde luego es un gran sabio. Vamos, que la voy a aplicar a partir de ahora en mi vida diaria. Me ha encantado.

Ana Saturno dijo...

Por cierto, en cuanto a lo de que conocieran tus gustos e intereses. ¿Alguien puede confirmarme si a los chicos también les aparecen los feeds del Hola y de esa página que se llama Nosotras? ¿Han hecho los de Gmail distinción por sexos y edades o de verdad son los mismos feeds para todos?

Muchas zenkius

Anónimo dijo...

El sargento Roger Murtaugh es el papel de Danny Glover en Arma Letal. :)

En cuanto a los webclips, me temo que no puedo ayudarte. Como no me interesaban para nada los borré todos de golpe hace ya tiempo. Le preguntaré a Xristo.

Anónimo dijo...

En efecto, son los mismos, al menos en español. :P

Ana Saturno dijo...

¡Muchas gracias! Por lo menos, es de agradecer que no discriminen por sexos. Nos dan la lata a todos por igual. :-D